Para sanar hay que estar en movimiento... Lo que no se mueve se estanca, comienza a estorbar, nos enferma...
Seamos nuestros mejores amigos, brindémonos amor y paciencia. Amemos nuestras luces y nuestras sombras, y dejemos partir lo que ya no nos hace bien.
Sigamos el consejo de Walt Whitman, siempre tan vigente "No te detengas".
0 Comments: